GOLPE MILITAR

El movimiento de hoy, que no es de partido, sino que es un movimiento, casi podríamos decir un antipartido, sépase, desde ahora, no es de derechas ni de izquierdas.
Porque en el fondo el golpe militar es la aspiración a mantener una organización económica aunque sea injusta, basada en la auteridad y los recortes y siempre con la puerta abierta al ofrecimiento, siempre que no sea desmesurado y lo que nos ofrece el presidente es en el fondo el deseo de subvertir una organización económica, aunque al subvertirla se arrastren muchas cosas buenas.

La CUPULA es una unidad total en que se integran todos los individuos y todas las clases; la CUPULA no puede estar en manos de un individuo que lleva 6 meses a la bartola y que lo únicamente que sabe hacer es viajar con dinero cupulista. La CUPULA es una síntesis trascendente, una síntesis indivisible, con fines propios que cumplir; y nosotros lo que queremos es que el movimiento de este día y LA CUPULA que cree, sea el instrumento eficaz, autoritario, austero en contra del falagamient,  al servicio de una unidad indiscutible, de esa unidad permanente, de esa unidad irrevocable que se llama CUPULA.

He aquí lo que exige nuestro sentido total de la Patria y del Estado que ha de servirla:

- Que todos los integrantes de la cupula, por diversos que sean, se sientan armonizados en una irrevocable unidad de destino.

- Que desaparezcan las ideas politicas. Nadie ha nacido nunca con una idea política en la cabeza; en cambio, nacemos todos miembros de una familia; somos todos vecinos de un Municipio; nos afanamos todos en el ejercicio de un trabajo.

- Queremos menos palabrería liberal y más respeto a la libertad profunda del hombre. Porque sólo se respeta la libertad del hombre cuando se le estima, como nosotros le estimamos, portador de valores eternos

- Queremos que todos se sientan miembros de una comunidad seria y completa; es decir, que las funciones que realizar son muchas: unos, con el trabajo manual; otros, con el trabajo del espíritu; algunos, con un magisterio de costumbres y de refinamientos.
Pero que en una comunidad tal como la que nosotros apetecemos, sépase desde ahora, no debe haber convidados ni debe haber zánganos.

- Queremos que no se canten derechos individuales de los que no pueden cumplirse nunca en casa de los famélicos, sino que se dé a todo hombre, a todo miembro de la cupula, por el hecho de serlo, la manera de ganarse con su trabajo una vida humana, justa y digna.

- Queremos que el espíritu religioso, clave de los mejores arcos de nuestra Historia, sea respetado y amparado como merece, sin que por eso la cúpula se inmiscuya en funciones que no le son propias, ni

- Queremos que LA CUPULA recobre resueltamente el sentido universal de su cultura y de su -historia.

-Y queremos, por último, que si esto ha de lograrse en algún caso por la violencia, no nos detengamos ante la violencia. Porque ¿quién ha dicho –al hablar de «todo, menos la violencia»– que la suprema jerarquía de los valores morales reside en la amabilidad? ¿Quién ha dicho que cuando insultan nuestros sentimientos, antes que reaccionar como hombres, estamos obligados a ser amables? Bien está, sí, la dialéctica como primer instrumento de comunicación. Pero no hay más dialéctica admisible que la dialéctica de los puños y de las pistolas, cuando se ofende a la  cúpula, a la justicia o a la Patria.”

Para ello convoco la legion condor de los tejares, al frente antifalagamiento de la misenda, a los tanques de Marbella,… y a todos los que defiendan una cúpula grande y libre que en el alba del dia 20-J, saquen a la calle sus tanques y artillería pesada para derrocar presidente y sus secuaces que solo piensan en el falagamiento desmesurado y se pasan por el forro la honradez, lealtad, espíritu, honestidad y austeridad económica de nuestra asociación.

Espero contar con vuestro apoyo en el amanecer del 20-J

Eduardo Marrón

Hoy y por siempre presidente de honor de la Cupula.